Nuestro papel en el ámbito laboral debe ser también el de mentoras, para que mujeres jóvenes interesadas en seguir carreras financieras se sientan apoyadas para romper estereotipos y eliminar barreras.

Autora: Pamela López, Head of Finance, Reservamos.

A lo largo de mi vida profesional me he preguntado, ¿cómo puedo abordar los retos que enfrento como mujer para tener una carrera exitosa? Siendo honesta sigo sin una respuesta clara; pero con el paso del tiempo he entendido que es una disputa de balance.

Hoy, pese a la época en la que vivimos, parece que el género aún determina menores probabilidades de éxito para una mujer; se nos ha subrepresentado y limitado por mucho tiempo. Claro que ha habido un reconocimiento creciente de la importancia de la diversidad en el lugar de trabajo, y el sector financiero no es una excepción; pero aún tenemos grandes retos por vencer.

Mujeres y Finanzas

Según un informe de la consultora Spencer Stuart publicado en 2021, en México, el porcentaje de mujeres CFOs en empresas del índice de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) es del 10%, mientras que en América Latina es del 12%.

Lo anterior no precede el impacto que tenemos en el sector financiero. Como mujeres desempeñamos un papel fundamental, aportando perspectivas y experiencias únicas que pueden conducir a una mayor innovación y éxito en resoluciones de problemas, de forma más eficiente. Al tener un equipo diverso, es factible que se propongan ideas y soluciones innovadoras, lo que en última instancia impulsa el crecimiento y el éxito empresarial. De acuerdo con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), si se cerrara la brecha de género en la tasa de participación laboral en América Latina y el Caribe, se podría aumentar el PIB de la región en un 16%, lo que equivale a $1,7 mil millones de dólares.

No suena nada mal, pero, ¿cómo podemos llegar a esa realidad? Nuestro papel en el ámbito laboral debe ser también el de mentoras, para que mujeres jóvenes interesadas en seguir carreras financieras se sientan apoyadas para romper estereotipos y eliminar barreras.

Es de vital importancia no perder de vista que en la industria existen todavía muchos desafíos que enfrentar, entre ellos la subrepresentación en puestos de liderazgo, la brecha salarial de género, así como la falta de equilibrio entre el trabajo y la vida diaria. 

A las mujeres, no solamente del sector financiero, se les suele pagar menos que a sus homólogos masculinos, incluso cuando tienen el mismo nivel de educación y experiencia. Esto puede dificultar que logremos una independencia financiera, y contribuye directamente a la falta de diversidad en los puestos de liderazgo senior. La brecha salarial entre hombres y mujeres en promedio a nivel mundial es del 23%, mientras que en México esa brecha rebasa el 34%. Esto de acuerdo a informes de IMCO e Inmujeres.

Las largas horas y la naturaleza exigente de la industria dificultan la posibilidad de equilibrar nuestras carreras con la vida personal. Esto puede ser particularmente desafiante para las mujeres, quienes muchas veces adquieren una mayor responsabilidad sobre el cuidado de los hijos o familiares adultos mayores en casa. Abordar estos desafíos es crucial para garantizar que el sector financiero sea diverso, inclusivo y refleje las necesidades demográficas.

Mujeres, tecnología y desarrollo

La tecnología está transformando el mercado de muchas maneras, desde el uso de inteligencia artificial y aprendizaje automático, hasta blockchain y monedas digitales. Estos avances están cambiando la forma en que opera la interacción con los clientes y administración de riesgo. 

La acelerada evolución del mercado nos exige la adopción de nuevas habilidades, pero también la creación de mecanismos necesarios para que la tecnología sea un impulsor, y no un obstáculo para el desarrollo profesional de las mujeres. En ese sentido, mujeres en puestos de liderazgo financiero debemos abanderar el camino en la adopción de plataformas y servicios digitales, explorando el potencial; para dar forma a un futuro del sector financiero más incluyente, agilizando un cambio positivo entre clientes, empleados y accionistas, por igual.

Para todas las mujeres que estén persiguiendo una carrera profesional en finanzas comparto algunas sugerencias para desarrollar y fortalecer sus habilidades y competencias. 

• Invertir en oportunidades de desarrollo profesional. Asistir a conferencias, talleres y sesiones de capacitación, pueden ayudar a mantenerse al día con las tendencias emergentes, y las mejores prácticas en finanzas y contabilidad. El aprendizaje continuo nos ayuda a acortar brechas y nos brinda habilidades de comunicación, pensamiento crítico y capacidad de análisis. 
• Buscar tutoría de ejecutivxs experimentadxs que puedan brindar orientación y apoyo a medida que avanzan en sus carreras. Lxs mentores también pueden ofrecer información sobre las habilidades y competencias necesarias para tener éxito en el rol de CFO.
• Las directoras financieras debemos crear redes de pares y colegas que puedan brindar apoyo y compartir conocimientos y mejores prácticas. Los eventos de networking, las organizaciones profesionales, y las plataformas de redes sociales, pueden ser excelentes fuentes de conexiones y apoyo.
• Asumir nuevos desafíos y oportunidades. Hay que asumir paulatinamente nuevos proyectos o roles que requieran extendernos más allá de nuestra zona de confort, para desarrollar y fortalecer habilidades y alcanzar un mayor liderazgo.

Sin duda los retos para las mujeres siguen siendo muy grandes, de ahí la importancia de seguir trabajando en equipo, para ayudar a más mujeres a desarrollar sus habilidades, establecer redes de apoyo y mentoría, y no temer a los nuevos desafíos y el aprendizaje constante. Sólo de esta forma podremos no sólo alcanzar nuestro éxito profesional, sino impulsar la economía de nuestros países.